¿Qué tiene de especial la ciencia?
Los niños son curiosos por naturaleza, en los primeros años de sus vidas lo quieren saber todo. Pero poco a poco pierden esa inquietud y el interés por saber de todo.
¿Quién es el culpable de esta pérdida de inquietud? evidentemente ¡ los niños no!, el propio sistema educativo es el responsable por hacerles pasar horas y horas sentados matándoles su creatividad y curiosidad, los profesores tienen que seguir un currículum donde no se cuestiona nada, simplemente se vuelca información a las personas sin hacerles pensar y dudar de todo. ¿Cuál es el motivo de que no se enseñe a los niños a pensar?
Como bien dice Neil DeGrasse:
“Nos pasamos el primer año de la vida de un niño enseñándole a hablar y caminar. Y el resto de sus vidas les decimos que se callen y se estén quietos”. Un consejo que debería hacer reflexionar porque el método científico -les guste o no a esos mayores que prefieren que los niños estén quitecitos.
En la mayoría de los colegios ya no hay laboratorios y pocos profesores hacen experimentos, la presión por seguir y terminar los libros no permite perder el tiempo en hacer experimentos y pocos se atreven a hacerlos, primero por desconocimiento, segundo por falta de material y tercero por las protestas de los padres que critican a esos maestros que no terminaron el libro o los propios profesionales que lo ven como una pérdida de tiempo.
Pero....las cosas van cambiando aunque ¡con demasiada lentitud!, una buena solución es el trabajo por proyectos donde los alumnos aprenden disfrutando y son el centro de sus propios aprendizajes pensando y razonando y sobre todo haciéndoles curiosos y cuestionando y aplicando el método científico.
Comentarios